06 marzo, 2011

El nuevo PRI

Humberto Moreira arriba como nuevo líder nacional del Partido Revolucionario Institucional. Llega como candidato de unidad, ya que los priístas han aprendido que si se dividen, volverán a perder la Presidencia de la República. Así les pasó hace seis años, cuando todo indicaba que Arturo Montiel era el puntero y entre Roberto Madrazo, Elba Esther y demás actores, se encargaron de hacerse la guerra interna, con el resultado desastroso de enviarlos al tercer lugar en las elecciones del 2006.

Llega con el objetivo de ganar las elecciones estatales de este año, sobre todo, la del Estado de México, para que su candidato, Enrique Peña Nieto, no tenga el mínimo raspón, el gel boy, el niño bonito, el candidato de Televisa, se encamine, tal como lo indican hasta el día de hoy todas las encuestas, tranquilo y sin problemas a la elección del 2012.

Humberto Moreira, en sus primeras declaraciones como líder del PRI, habla de lo que van a hacer una vez que sean gobierno, critica el desempleo, la inseguridad y hasta la política económica. Olvida que desde las elecciones intermedias de este sexenio, en el año 2009, el PRI y el Partido Verde, su aliado en todas las batallas electorales de este periodo, son mayoría en la Cámara de Diputados. Han podido hacer valer su mayoría, actuar a favor de las clases populares que dicen defender y no lo han hecho.

Han aplicado la estrategia de que Calderón se ahorque solo, así tienen  rentabilidad política para su campaña en busca de la presidencia del país en el año 2012.

Moreira olvida que él era gobernador del estado de Coahuila cuando ocurrió la tragedia de la Mina de Pasta de Conchos, en febrero de 2006. Hasta el momento no se ha aplicado la justicia a favor de los familiares de los 65 mineros muertos. Sobre él pesan acusaciones de corrupción al proteger a los dueños de la mina y, por lo menos, de complicidad al no haber procurado justicia.

Se habla de un nuevo PRI. Personalmente no les creo.

Una de sus primeras medidas de Moreira, ha sido incorporar a Fidel Herrera Beltrán a la nueva dirección que encabeza. Seguramente es su premio por haber conservado el estado de Veracruz para el partido tricolor. Por mostrar cómo ganar una elección “haiga sido como haiga sido”.

Este es el nuevo PRI de Moreira, el de un exgobernador que dejó quebrado a nuestro estado, con una ola terrible ola de corrupción con tal de conservar el poder. Los municipios sin recursos, los expresidentes, saqueando a su antojo, sabiendo que el ORFIS les garantizará impunidad.

El nuevo PRI es el de Guadalupe Porras David, una exalcaldesa que terminó su mandato acusada de una terrible ola de corrupción, señalamientos de mal uso de recursos, sin obra pública que destacar, con procedimientos que, hasta la fecha, le reclaman 75 millones de pesos, mas lo que se acumule de la revisión del año 2010.

El nuevo PRI es el de Marcos Theurel Cotero, acusado de malos manejos y complicidad con su suegra, Guadalupe Porras en obras ejecutadas en Minatitlán, de cobrar, a través de prestanombres, 30 millones de pesos por cuatro pilotes para el puente a Capoacán. También ha sido acusado de complicidad en ese barril sin fondo llamado Túnel Sumergido, donde cientos de millones de pesos se han tirado a la basura.

El nuevo PRI es el de Federico Lagunes, columnista cuenta chistes del Diario del Istmo y ahora regidor en el municipio de Coatzacoalcos. Acusado de varios delitos, entre ellos, portación de arma y amenazas; señalado de extorsionador profesional por golpear o alabar a personajes políticos cuando escribía en ese periódico. También ha sido acusado de cobrar como aviador en la CMAS de Coatzacoalcos.

El nuevo PRI es el de Antonio Lázaro, expresidente de Jáltipan, señalado por saquear el ayuntamiento, dejarlo prácticamente quebrado, el DIF, sin equipo ni recursos, con deudas por todos lados.

El nuevo PRI encierra a tantos y tantos personajes, tantos apellidos, tantos nombres, los cuales, sabemos bien, sólo obtendrán impunidad si el PRI regresa a la Presidencia de la República. Así como han obtenido impunidad por el arribo de Javier Duarte a la gubernatura.

El nuevo PRI hablará de los pobres, olvidando que ellos son los que los crean por montones al saquear los ayuntamientos, al inflar obra pública, al robarse elecciones. Los necesitan para sobrevivir, para que, a cambio de unas migajas en tiempos de elecciones, vuelvan a darles su voto.

Ese es el nuevo PRI, desde la cabeza, corrupción en impunidad, con la amenaza de su regreso.



1 comentario:

  1. Sería interesante hacer un ejercicio narrativo, tal vez mediante una crónica pero haciendo uso de del "FlashForward" para vislumbrar el provenir no del PRI, (del que ya es evidente como se reinventa para convertirse en lo mismo,pero a través de distintas caras, como el monstruo de Hydra) sino de de las ciudades gobernadas y mal administradas por los gobiernos priistas. Minatitlán es un ejemplo potenciado de lo que ocurre en tales circunstancias y no hace falta ser politólogo o analista de primera línea para comprender lo que pasa en nuestra querida ciudad; tan solo ver cómo está la infraestructura urbana nos indica la obtusa visión, si no es que mala fé, que tienen los que están y han participado en el ayuntamiento. Un dato que me llamó la atención es enterarme que piensan mover al Flechador a la salida, mientras que Don Lazaro Cárdenas al parecer continuará inmóvil junto a su glorieta que le robó un carril de cada lado a la Av. Justo Sierra y que solo se utiliza el 18 de Marzo de cada año y unos pocos días cuando practican las batucadas para el gris carnaval. ¿Cómo es posible que los accesos a la ciudad estén en tan deplorables condiciones y cada año lo reparen? Sabemos por qué lo hacen, pues sigue siendo un negocio rentable y "permisible", eso explica la "renovación" del parque Independencia pero no justifica el cierre de la calle 5 de Febrero, entre Lerdo y Amelia Riveroll, que es el único desahogo al tráfico de la calle Hidalgo. Y ya en política es mejor callarse la boca, al menos públicamente pues ya sabemos lo que "puede pasarnos" si hablamos de más. Es por esta razón que los ciudadanos conciente o inconcientemente vivimos en un pasotismo y preferimos resignarnos a nuestra suerte en relación a tanats cosas, como las vialidades destruidas, la mala planificación y ejecución de obras, la mala y amañada administración de recursos... En sí, estamos viviendo nuestro propio "FlashSideway", que es ya la única forma de vivir.

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