Jorge Luis Torres Marcos
@jltm68
“No
des a nadie lo que te pida,
sino
lo que entiendes que necesita;
y
soporta luego la ingratitud”
Miguel de Unamuno
Una larga resaca es que la ha ocurrido después de las elecciones del 7 de
junio.
Los líderes de los partidos no han entendido el mensaje: los ciudadanos están
hartos de todos, a la usanza de los indignados europeos se les puede decir: No
nos representan.
Así, después de la lectura equivocada de los resultados, los bufones celebran
y los malos perdedores buscan culpables.
La crisis de los partidos ha llegado a México y la clase política reacciona como el avestruz. El sistema político mexicano ha tocado fondo y se
comete el error de que a nuevos problemas, aplican soluciones antiguas.
En otros países, ante resultados adversos, los líderes de los partidos ofrecen
su cargo pero realizan un análisis interno de lo ocurrido y si es necesario, ajustan
propuestas y estrategias de acuerdo a lo expresado por los electores.
En nuestro país sólo hacen cuentas alegres de los resultados y promueven
linchamientos de dirigentes, para inmediatamente después iniciar con el futurismo.
Inseguridad, desempleo, crisis, abstencionismo, voto nulo, entre otros temas,
quedan en el olvido hasta la nueva contienda.
No se escuchó el silencio de las urnas, probablemente la clase política va
a escuchar otro tipo de expresiones. Tal vez no tan pacíficas como la del 7 de
junio.
Veracruz
Una cosa es El Bronco y otra cosa es Renato Tronco.
Fidel Herrera sigue operando y buscará de cualquier manera impedir una
alianza opositora que sería letal para su maximato. No se conforma con gobernar
por 12 años, quiere más y para ello necesita actores para su comedia, Tronco es el primero.
No hay otro posible opositor que pueda confrontarlo hasta el momento, sólo Miguel Ángel Yunes Linares. Veremos qué papel juega Dante Delgado, qué propuesta
presenta MORENA y si se puede concretar una alianza para derrotar la maquinaria
fidelista.
El senador pobre, pobre senador
De parte del PRI, Héctor Yunes salió a hacer su parte en ésta comedia.
Después del destape del suegro de Javier Duarte, Yunes Landa anda
recorriendo el estado para sumar adeptos a su causa.
Llegó a Minatitlán a una reunión con periodistas con motivo del Día de la
Libertad de Expresión. Se invitó a directores de medios, reporteros,
columnistas y fotoperiodistas de Minatitlán, Jáltipan y Cosoleacaque.
Un espacio pequeño para los convocados, caluroso, los únicos que comieron
fueron los de la avanzada del senador, total desorganización.
Héctor Yunes llegó con dos pantallas y dos tablets. Al ver a los
asistentes, el rostro se le desencajó, así que tuvo que pedir apoyo a sus
amigos y que le consiguieran al menos dos pantallas más.
Se hace la rifa, se arma el caos.
Héctor se retira molesto de la reunión y se va a reunir con los periodistas
de Coatzacoalcos. Restaurante rentado, cena, plática, tragos. Su manera de ver
las cosas es clara: entre los amigos de la prensa hay niveles.
Ahí comete un grave error: se pone a contar lo ocurrido en Minatitlán y
entre risas de los asistentes, los llama “vedetes”. De eso se agarra Carlos
Velasco Jara, vocero del poder, para exhibir a sus compañeros de profesión en Olmeca
TV, donde participa como “analista político”.
Un senador pobre, un senador con la boca muy grande, un senador que se ha
agarrado a la greña sin medir consecuencias.
Probablemente los compañeros de los medios de Minatitlán no se han ganado
el respeto de los políticos, probablemente hay algunos que abusan de su estatus,
como sea, quien quiere llegar a la gubernatura tendría que saber qué terrenos
pisa y hacer gala de prudencia, que en éstas tierras todo se sabe.
Así empieza su carrera por la gubernatura Héctor Yunes, mostrando sus
carencias.
De salida
Mala comunicación política de la mayoría de los excandidatos a la
diputación federal por el Distrito XIV. La única que agradeció de inmediato la
votación recibida, fue Claudia Aguilar del PAN y unos días después, la Dra.
Oloarte de MORENA.
Insisto, una cosa es el convivir y otra saber realizar un trabajo serio. A algunos
les dieron para sus chicles y para sus
tunas para el resto del año. Se los dije.
Por cierto, difícil adivinanza: ¿Sabe usted qué candidato dejó adeudos de campaña?
Una pista: también le debe dinero al SAT.
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